El cero neto es una estrategia esencial para la logística sostenible. Aprenda cómo una gestión energética eficiente impulsa su negocio.
Si le preocupa el cuidado ambiental, es probable que conozca el concepto de cero neto. Aquí veremos, en profundidad, de qué se trata. Y, sobre todo, cómo influye en la intralogística, el ámbito concreto que en esta oportunidad nos interesa. Porque, actualmente, la logística de tipo sostenible ya no es solo una tendencia: se ha convertido en un pilar estratégico.
En Jungheinrich sabemos que el futuro de la logística está ligado a la sostenibilidad; pero también que la descarbonización es una oportunidad estratégica para un negocio. De este modo, deja de ser solo una obligación ambiental. Esto es así debido a que ayuda a la optimización de recursos, fomenta el ahorro y aumenta la competitividad.
Por todo ello, queremos que los profesionales dispongan de una guía completa sobre el concepto cero neto, para que sepan cómo pueden aplicarlo en su cadena de suministro.
Los científicos coinciden en que, para evitar que el calentamiento global supere el umbral de 1,5 °C, las emisiones de carbono procedentes de actividades humanas a corto plazo (como la quema de combustibles fósiles) deben reducirse. Concretamente, entre un 45 % y un 50 % para el 2030. Y al menos un 90 % para el 2050 (IBM, s.f.)
Estos datos dimensionan la urgencia de un compromiso ambiental por parte de las empresas. Y en la intralogística, el concepto cero neto es una estrategia poderosa para aquellas que quieren reducir su impacto ambiental. Además, les sirve para optimizar sus operaciones y generar ahorros.
Pero, ¿en qué consiste exactamente? Simplificando, podemos decir que implica implementar un proceso de descarbonización de los procesos internos. Y, esto abarca desde el consumo de energía hasta la gestión de los recursos (Logística Profesional, 2023).
El término cero neto se refiere al equilibrio entre la cantidad de gases de efecto invernadero (GEI) que se emiten a la atmósfera y la cantidad que se retira de ella. Para alcanzar el cero neto, una empresa debe centrarse, principalmente, en reducir sus emisiones; debe lograr lo máximo posible de dicha reducción, antes de recurrir a la compensación.
Entonces, el motor que impulsa el camino al cero neto es una gestión energética eficiente. Al optimizar el consumo de energía en el almacén, las empresas pueden reducir sus emisiones. Y, al mismo tiempo, pueden generar ahorros en sus costes operativos. Eso afecta a decisiones diversas: desde la elección de equipos hasta la optimización de los procesos (Logística Profesional, 2025).
En cuanto a la certificación de cero neto, podemos decir que es un proceso riguroso. Y que en él se valida el compromiso de una empresa con el cuidado ambiental (Sika, s.f.)
Dado su impacto positivo, quizá pueda pensar que el desarrollo de este proceso es muy complejo. Pero lo cierto es que se puede dividir, apenas, en las siguientes tres etapas:
No cabe duda de que, al optimizar las rutas de transporte, utilizar equipos de manejo de materiales eficientes y adoptar fuentes de energía limpias, las empresas pueden lograr una reducción significativa en sus emisiones (Logística Profesional, 2024).
Antes de implementar cualquier estrategia para alcanzar el cero neto, es esencial medir y comprender la huella de carbono. Eso implica un análisis profundo de las emisiones generadas en cada etapa de la cadena de valor.
El proceso se divide en tres categorías. Se trata de una clasificación estandarizada que permite a las empresas identificar las áreas de mayor impacto. Así enfocan sus esfuerzos de reducción de manera efectiva. Estas son las siguientes:
La gestión energética efectiva comienza con este análisis detallado; el cual ayuda a los directores de logística a tomar decisiones basadas en datos, para reducir impacto ambiental estratégicamente (Sika, s.f.)
La transición hacia una operación más limpia va de la mano de la innovación. Las empresas que apuestan por la sostenibilidad están explorando nuevas tecnologías y modelos de negocio que reducen su dependencia de los combustibles fósiles y optimizan el uso de los recursos (Logística Profesional, 2024). Veamos dos cuestiones clave: energías limpias y economía circular.
Instalar paneles solares en los techos de los almacenes es una estrategia muy efectiva para reducir emisiones del Alcance 2. El autoconsumo de energía limpia disminuye la factura eléctrica. Y, también, genera una fuente de energía sostenible para alimentar la flota de carretillas eléctricas y otros equipos del almacén. Esta inversión se amortiza a largo plazo y mejora la reputación de la empresa, porque demuestra un compromiso real con el ambiente (Logística Profesional, 2025).
La logística de tipo sostenible no solo implica reducir las emisiones: también optimizar el uso de los recursos. Aquí es donde la economía circular juega un papel fundamental. Se trata de un modelo de producción y consumo que implica compartir, alquilar, reutilizar, reparar, renovar y reciclar materiales. Todo esto para que productos existan durante el mayor tiempo posible.
En un almacén, esto se traduce en reutilizar embalajes, reparar equipos en vez de sustituirlos y gestionar eficientemente los residuos generados. Implementar principios de economía circular es una estrategia para reducir la dependencia de materias primas y minimizar el impacto ambiental en toda la cadena de suministro (Sika, s.f.)
Por ello, en Jungheinrich somos cómplices de las empresas que quieren llevar a cabo una logística sostenible. Ofrecemos muchas soluciones que ayudan a optimizar la cadena de suministro y a avanzar hacia el cero neto.
Nuestra oferta incluye carretillas elevadoras con baterías de litio de última generación. Pero también la planificación y el diseño de almacenes que priorizan la sostenibilidad. Ofrecemos asesoramiento desde la fase de planificación hasta la implementación. Y nuestro servicio técnico garantiza la máxima fiabilidad.
Confíe en nuestra experiencia para llevar su negocio al siguiente nivel de sostenibilidad y rentabilidad. Conozca cómo las soluciones de Jungheinrich España de logística sostenible pueden ayudarle a alcanzar el cero neto.